El colectivo malagueño se reunió ayer con el subdelegado del Gobierno, que prometió más atención policial a estos casos
Representantes de la asociación Ojalá mantuvieron ayer una reunión con el subdelegado del Gobierno en la provincia, Hilario López Luna. Lo hicieron, en primer lugar, para darle a conocer este colectivo, pero también para trasladarle su preocupación por las numerosas agresiones que sufren, tanto a nivel nacional como local. Para ello, presentaron al subdelegado del Gobierno un estudio donde se refleja que el 60% de los integrantes de este colectivo ha sufrido algún tipo de ataque. "Pero lo peor es que sólo el 11% de las veces el caso se llega a denunciar a la Policía", explica Javier García, responsable del colectivo en Málaga. La vergüenza ante el acoso sufrido o la falta de información hace que muchos de los agredidos no se atrevan a elevar su caso a una denuncia "y simplemente lo dejan pasar", añadió García. "También parece que en el colectivo hay una sensación de que no se le da importancia a este tipo de casos desde las fuerzas policiales, así que comunicaré tanto a la Policía Nacional como a la Guardia Civil que pongan la máxima atención cuando haya el menor síntoma de que una agresión pueda tener como base la homofobia", aseguró por su parte López Luna. De hecho, la Subdelegación ha establecido una vía de comunicación "directa" con Ojalá para que sus integrantes denuncien cualquier agresión que ocurra en Málaga. El número de agresiones -tanto a nivel estatal como provincial- ha crecido desde el año 2005, según subrayó el portavoz de Ojalá, que indicó que la causa para este incremento se debe a que desde ese año, "el colectivo ya no tiene miedo a salir a la calle". "Paseamos de la mano, nos casamos, salimos con total normalidad y asistimos a cualquier evento como todo el mundo, algo que antes no se hacía con esa tranquilidad y hay un mínimo porcentaje de la población a la que eso no le gusta", concluyó Javier García, que anunció el lanzamiento de una campaña para animar a los que sufran algún ataque a denunciar y que se realizará un estudio a nivel local "para conocer cómo está la situación aquí". "Está claro que se ha dado una rápida adaptación a estos nuevos derechos por parte del colectivo, pero ha calado tanto en la sociedad", explicó López Luna, que asegura que aunque hay una "igualdad legal" en la sociedad ésta no es palpable a nivel "real".
Representantes de la asociación Ojalá mantuvieron ayer una reunión con el subdelegado del Gobierno en la provincia, Hilario López Luna. Lo hicieron, en primer lugar, para darle a conocer este colectivo, pero también para trasladarle su preocupación por las numerosas agresiones que sufren, tanto a nivel nacional como local. Para ello, presentaron al subdelegado del Gobierno un estudio donde se refleja que el 60% de los integrantes de este colectivo ha sufrido algún tipo de ataque. "Pero lo peor es que sólo el 11% de las veces el caso se llega a denunciar a la Policía", explica Javier García, responsable del colectivo en Málaga. La vergüenza ante el acoso sufrido o la falta de información hace que muchos de los agredidos no se atrevan a elevar su caso a una denuncia "y simplemente lo dejan pasar", añadió García. "También parece que en el colectivo hay una sensación de que no se le da importancia a este tipo de casos desde las fuerzas policiales, así que comunicaré tanto a la Policía Nacional como a la Guardia Civil que pongan la máxima atención cuando haya el menor síntoma de que una agresión pueda tener como base la homofobia", aseguró por su parte López Luna. De hecho, la Subdelegación ha establecido una vía de comunicación "directa" con Ojalá para que sus integrantes denuncien cualquier agresión que ocurra en Málaga. El número de agresiones -tanto a nivel estatal como provincial- ha crecido desde el año 2005, según subrayó el portavoz de Ojalá, que indicó que la causa para este incremento se debe a que desde ese año, "el colectivo ya no tiene miedo a salir a la calle". "Paseamos de la mano, nos casamos, salimos con total normalidad y asistimos a cualquier evento como todo el mundo, algo que antes no se hacía con esa tranquilidad y hay un mínimo porcentaje de la población a la que eso no le gusta", concluyó Javier García, que anunció el lanzamiento de una campaña para animar a los que sufran algún ataque a denunciar y que se realizará un estudio a nivel local "para conocer cómo está la situación aquí". "Está claro que se ha dado una rápida adaptación a estos nuevos derechos por parte del colectivo, pero ha calado tanto en la sociedad", explicó López Luna, que asegura que aunque hay una "igualdad legal" en la sociedad ésta no es palpable a nivel "real".