sábado, 7 de marzo de 2009

Los coínos se gastan en los comercios más de seis millones de pesetas en tres semanas

La asociación de empresarios podría ampliar el plazo de la campaña que permite pagar con la antigua moneda
Los vecinos de Coín han encontrado la fórmula perfecta para dar salida a los viejos billetes que guardaban en los cajones. La campaña 'Vuelve la peseta', organizada por la Asociación de Jóvenes Empresarios y Profesionales (Ajep), ha tenido más éxito del esperado y en apenas tres semanas ya se han cambiado más de seis millones de las antiguas monedas (unos 36.000 euros).
Así lo dio a conocer el gerente de la Ajep, Francisco Rueda, quien se mostró sorprendido por la aceptación de la iniciativa entre la ciudadanía. «Hasta el momento se han superado todas nuestras expectativas», manifestó Rueda.
Cabe recordar que en la campaña participan unos 200 comercios que están permitiendo que sus clientes realicen sus compras pagando en pesetas. La medida se puso en marcha el pasado día 14 de febrero y, aunque en principio estaba previsto prolongarla hasta finales de ese mes, finalmente se decidió mantenerla hasta el 14 de marzo. De hecho, en la Ajep están valorando ampliar todavía más el plazo en caso de que se mantengan las buenas cifras. «Estamos casi seguros de que superaremos al menos los diez millones de pesetas», afirmó el gerente.
Algunos comerciantes han comprobado con asombro que muchos vecinos todavía guardaban en sus casas billetes de hasta 10.000 pesetas. «Incluso hubo una anciana que se presentó con 1.500 pesetas sólo en monedas antiguas», comenta Rueda. En ese caso, se hizo una excepción y se permitió que la mujer hiciera su compra, ya que en realidad sólo se permite pagar con billetes (de la época que sea) y con monedas de la última edición (1999).
Negocios de toda clase
Es la propia asociación de empresarios la que se está encargando de recoger el dinero que recaudan los negocios y cambiarlo en el Banco de España por euros. Francisco Rueda destacó que entre los comercios participantes hay establecimientos de todo tipo, desde bares hasta tiendas de ropa, zapaterías, agencias de viajes y un hotel.
A lo largo de estas tres semanas se han registrado curiosas anécdotas, como la de un par de clientes que pagaron sus compras con billetes de la época de la República o como la de una persona que se gastó cerca de 20.000 pesetas en frutos secos.